La Iglesia católica ha recibido muchas críticas a lo amplio de su historia, desde Internamente como desde fuera de ella. Las críticas se dividen principalmente en dos grupos: las que se refieren a aspectos doctrinales, y las que censuran el comportamiento (Vivo o supuesto) de los católicos en su conjunto o en porcentajes de cierta relevancia (sea que vivan de acuerdo con las enseñanzas de la Iglesia, sea que actúen en contra de las mismas).
1. Muchos herejes bautizados han sido educados en creencias erróneas. Su caso es enteramente diferente del de aquellos que han renunciado voluntariamente a la fe. Ellos aceptan que lo que creen es revelación divina. Así estos pertenecen a la Iglesia en deseo, pues en su corazón ansían cumplir la voluntad de Dios respecto a ellos. En virtud de su bautismo y su buena voluntad, pueden estar en estado de Gracejo. Pertenecen al alma de la Iglesia, aunque no estén unidos al cuerpo visible.
Por el Bautismo los cristianos son liberados del pecado y regenerados como hijos de Jehová, llegan a ser miembros de Cristo y son incorporados a la Iglesia y hechos partícipes de su delegación.[61]
Como cuando una pareja se va a casar, la novia no puede pensar "me caso contigo y te entrego toda mi vida incondicionalmente, pero yo no plancho, ni lavo, ni hago de engullir". Cuando amas lo das todo sin límites, y aceptas los requisitos sin límites.
La jurisdicción interna es la que se ejerce en el tribunal de la penitencia. Difiere de la jurisdicción externa de la que hemos estado hablando en que su objeto es el bienestar del penitente individual, mientras que el objeto de la jurisdicción externa es el bienestar de la Iglesia como un organismo colectivo. Para practicar esa jurisdicción interna, el poder de órdenes es una condición esencial: nadie sino un sacerdote puede descargar. Pero el poder de órdenes es por sí solo insuficiente.
Una de las decisiones más importantes que debe tomar la Iglesia es la disyuntiva de un nuevo Papa, cuando el mandato del precedente finaliza por su renuncia o crimen.
Iglesia Anglicana: Fundada por Enrique VIII, rey de Inglaterra. Las principales diferencias con la Iglesia Católica pasan por el hecho de que las mujeres pueden ser sacerdotes y incluso porque los homosexuales están habilitados a participar incluso ejerciendo el sacerdocio. Igualmente rechaza la autoridad papal.
Ya se ha observado (VI ) que un miembro de la Iglesia puede sobrevenir perdido la Agudeza de Jehová. En este caso es una rama marchita de la Vid verdadera; pero no se ha separado definitivamente de ella. iglesia en la comuna del bosque Aún pertenece a Cristo. Se requieren tres condiciones para que un hombre sea miembro de la Iglesia:
Incluso los enemigos de la Iglesia se dan cuenta de la santidad de la Culto. Ciertamente, los frutos de santidad no se encuentran en las vidas de todos los hijos de la Iglesia. La voluntad del hombre es atrevido, y aunque Todopoderoso dé la gracia, muchos de los que se han unido a la Iglesia por el bautismo hacen poco uso del don. Pero en todas las épocas de la historia eclesiástica ha habido muchos que han ascendido a las sublimes cumbres de la abnegación, del inclinación al hombre y del aprecio a Todopoderoso. Sólo en la Iglesia Católica se encuentra esta especie de carácter que reconocemos en los santos---en hombres tales como Santo Francisco Javier, Santo Vicente de Paul y muchos otros. Fuera de la Iglesia los hombres no buscan tal santidad. Encima, los santos y todos los demás miembros de la Iglesia que han escaso algún jerarquía de piedad, siempre han estado dispuestos a distinguir que debían todo lo que Bancal bueno en ellos a la gracia que concede la Iglesia.
Sin la Iglesia, el cristianismo se hace inofensivo. La Iglesia traduce el cristianismo en un cristianismo Verdadero. Sin la Iglesia, el Evangelio sería como cualquier ejemplar o como una plastilina en donde cada quien modelaría su propio cristianismo, el que quisiera, como más le convenga o le guste, haciendo a un lado aquello que le desagrada y exige.
Nadie es capaz de ejercitar autoridad con tal finalidad, a excepción de que el poder le sea comunicado de una fuente divina. El caso es completamente diferente si a la sociedad civil se refiere. Aquí el fin no es sobrenatural, sino el bienestar temporal de los ciudadanos. No puede decirse que se requieran unas dotes especiales para hacer a cualquier clase de hombres capaz de acomodarse el puesto de gobernantes y guíFigura. De ahí que la Iglesia apruebe igualmente todas las formas de gobierno civil que estén en consonancia con el principio de Neutralidad. El poder ejercido por la Iglesia mediante el sacrificio y el sacramento (potestas ordinis) cae fuera del tema presente. Aquí nos proponemos considerar brevemente la naturaleza de la autoridad de la Iglesia en su función (1) de enseñar (potestas magisterii) y (2) de gobierno (potestas jurisdictionis).
Se establece que, para integrar la comunidad de la Iglesia Católica, las personas han de recibir el sacramento del bautismo. En Militar, las familias que profesan esta Certeza bautizan a sus hijos e hijas cuando son muy pequeños, y luego se da un acto formal de renovación de las promesas bautismales que, en esa instancia temprana, el padre, la raíz, el padrino y la Prónuba respondieron traslativamente.
Hace poco, me dijo una amiga, que desde que se cambió de la Iglesia Católica a otra distinta, vive mejor y hace más cosas buenas, y hasta ha logrado deshacerse de vicios. Podemos con esto concluir que en muchas otras "iglesias" (recuerda que es el cuerpo contemplativo de Cristo, y ni modo que tuviera varios cuerpos) poco bueno debe acaecer, y si aunque sea eso bueno se vive, se pueden ganar buenas cosas; pero es necesario hacer notar que si ella hubiera vivido todo lo bueno que tiene nuestra Iglesia, simplemente resistiría a niveles como el de la Origen Teresa de Calcuta: a la santidad.
La doctrina fundamental para la Iglesia católica se encuentra en el credo, que recoge las fórmulas de Certeza elaboradas en los primeros concilios de la historia.